
No sabemos de dónde le viene el nombre a esta Compañía, pero haciendo honor a este mamífero cavicornio se han especializado en rumiar con infinita paciencia (nos confesaron los largos procesos trabajando los textos) la raíz de todos estos clásicos para acabar regurgitando la misma base de los personajes, pero totalmente travestidos en las formas. Y por ahí nos atrapan. Aparentando un juego, un sinsentido estúpido que inmoviliza cualquier atisbo de enfrentamiento a su desidia, van construyendo con mano artesana una maravillosa criatura que nada más echar a andar nos engancha como espectadores. Gritan, lloran, ríen, comen, se pelean y todo para intentar ocultar una soledad que pesa como una losa.
Son unos actores todo terreno que jamás, repetimos, jamás nos van a dejar indiferentes. Bajo la dirección de Damián Cervantes devoramos estos sesenta minutos que nos parecen diez y asentimos sonriendo porque efectivamente, este recuerdo (Vaca35) ya nadie nos lo podrá quitar.
Y repiten dos días más en La Casa de La Portera.
Compañía: Vaca 35 Teatro
Dirección: Damián Cervantes
Intérpretes: Diana Magallón, Mari Carmen Ruíz, Gabriela Ambriz, José Rafael Flores y Héctor Hugo de la Peña.
En Fringe Madrid los días 18,19,20 y 21 de julio.
En La Casa de la Portera los días 25 y 26 de julio.
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